Pequeñas biografías docentes

Hoy 5 de octubre, Día Mundial de las y los Docentes, compartimos una breve selección de historias que nos comparten desde Semilleros Creativos, en las que nos describen, en grandes pinceladas, un poco de su vida y vocación, recordándonos la diversidad y variedad de perfiles de docentes, promotoras y promotores con los que contamos.

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Nací en los algodonares, bajo un sol abrasador, en mi querida ciudad de Mexicali. Aquí me crie con el calor del norte. Mi abuelo era historiador. De ahí que el primer libro que tuve en mi vida fue: Y nació pueblo nuevo. Apenas llevaba pocos meses en este mundo, y mi abuelito me regala ese libro con una dedicatoria que dice: “Para mi nietecito, para que no olvide que la cultura se hace y retransmite con la práctica diaria”. Esa ha sido la base para todo lo siguiente en mi vida.

Erik Felipe Güicho Gomez, Semillero de Pintura y Escultura de Mexicali, Baja California

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Desde que era niña, sabía que pintar era lo que quería hacer toda la vida... y es que podía pasar horas practicando con mi papá, quien me enseñó a observar la forma y el color. A su vez, mi papá aprendió de mi abuelo: Nicolás Antúnez, pintor de nuestro pueblo.

La primera vez que compartí un taller con niñas y niños fue en mi pueblo: aquella vez me di cuenta que esa era la primera vez que muchas niñas y niños tomaban un pincel. Posterior a eso, compartí talleres en espacios privados donde los padres tenían la posibilidad de pagarlos. Eso me hizo reflexionar sobre la desigualdad en el acceso a la educación y a la cultura: allí nació mi motivación para dedicarme al acompañamiento de la infancia desde las artes. Aunque ya no soy una niña, sigo soñando con que todas las niñas y niños algún día puedan vivir de manera igualitaria con las mismas oportunidades, el arte transforma vidas.

En mis planes, nunca estuvo ser maestra, y sigo creyendo que el camino del aprendizaje está en acompañar y compartir: así como un día lo hizo mi abuelo y mi papá conmigo.

Sandra Karen Antúnez Peña, Semillero Creativo de Dibujo y Pintura en Iguala de la Independencia, Guerrero

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Me gustan las artes, vivo rodeada de mi cultura y soy partícipe de ella. Soy una mujer yaqui que incursionó en la música tradicional. También me gustan las artes escénicas. Como soy una de las primeras mujeres en ser música en mi comunidad, me gusta motivar a niñas y niños el interés por las artes y que se expresen.

Evelin Ibarra Osuna, Semillero Creativo de Teatro en Lengua Yaqui de Pótam, Sonora

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Soy un enamorado de la lectura, y un apasionado de la escritura, especialmente de la poesía. ¿Por qué la poesía? Porque conozco poemas que han salvado vidas, sin que lo sepan ni los poemas ni las vidas. La poesía nos ayuda a conocernos, a desconocernos y a rehacernos.

Francisco Márquez Razo, Semillero Creativo de Literatura y Escritura Creativa Vicente Guerrero, Durango

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Nací en 1982. Soy artesana en telar de cintura, originaria de Xochistlahuaca, Guerrero. Aprendí a tejer desde niña a los 7 años de edad: me enseñó mi mamá. A los 9, aprendí a hilar en malacate en algodón natural: me enseñó mi abuela materna. Hasta ahora, sigo trabajando lo que aprendí de mi familia. Es una gran labor que va de generación en generación y yo la conservo, la rescato y la valoro. Amo mi trabajo: es lo único que tengo para salir adelante.

Amancia Merino Valtierra, Semillero Creativo de Lengua Amuzgo y Textiles en Tlacoachistlahuaca, Guerrero 

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Me tocó nacer en una ciudad que es recorrida por muchos pasos, de muchas personas de todos lados del mundo. Por eso aprendí a ver la magia en la diversidad y los mundos posibles. Quizás fue esa la razón que me hizo enamorarme del arte y especializarme en el teatro porque, es a través del universo escénico, que encontré un lenguaje para recorrer las mentes de seres inimaginables.

Griselda Hernández Rodríguez, Semillero Creativo de Teatro y Títeres en Tijuana, Baja California

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Nací en Ciudad Obregón, Sonora, y pertenezco a la tribu yaqui. Desde niño se me inculcó por parte de mis padres y, sobre todo, mis abuelos, el amor por mi cultura y mis tradiciones. Tuve muchos maestros con los que toqué y dancé la música y danza propia de mi pueblo. En ese andar, me di cuenta que yo también quería y podía enseñar como ellos lo hicieron conmigo. Y transmitir ese conocimiento ancestral que tenemos, además de otros conocimientos que he adquirido durante mi vida, como la música.

César Ricardo Arenas Baltazar, Semillero creativo de cultura yaqui en Guaymas, Sonora

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Cuando era pequeña, mis padres siempre me llevaban a todos los circos y de ahí resultó mi gusto por este. Pero, sobre el amor y las ganas de ser payasa, fue cuando descubrí la vocación para la felicidad.

Ale es mi hermana con discapacidad, de aquí parte mi vida en la docencia. Siempre quise que ella tuviera un espacio en donde yo pudiera enseñarle a hacer teatro, ya que el arte le dio sentido a mi vida. Lo que más me hace saltar de felicidad en esta vida es estar en un escenario con una nariz roja.

Claudia Guadalupe Caballero Peñaloza, Semillero Creativo de Circo en Gómez Palacio, Durango

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Soy de las pocas mujeres yaquis que se dedican a la música y a fortalecer e impulsar en el ámbito cultural a los niños, jóvenes y adolescentes de mi nación yaqui. La docencia llegó a mí por una necesidad en mi comunidad: ya que no había ninguna mujer yaqui que se dedicara a en enseñar arte, cultura, tradición. Esto ha sido un gran reto, ya que tuve que trabajar el doble que un hombre, para lograr tener el respeto de mi comunidad.

Amairani Zavala Ibarra, Semillero Creativo de Cultura Yaqui de Guaymas, Sonora

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Soy nacida en Baja California. La migración es parte de mis raíces, de la misma forma que la multiculturalidad y la interculturalidad. El gusto por la docencia lo tengo prácticamente desde que recuerdo. La forma en que me enseñó a leer mi maestra de primero de primaria, la repliqué con mi hermana dos años menor en casa. El acercamiento al arte y la cultura lo viví en educación básica: cursé mis grados escolares en escuelas públicas que promovían el baile folclórico, que nunca fue mi fuerte, hasta que conocí el teatro en primaria; la poesía en secundaria y tomé gusto por la literatura en general.

Blanca Nieves Alvarez Dorado, Semillero Creativo de Pintura en Tijuana, Baja California

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Desde muy pequeña me gustó la idea de ser maestra; siempre jugaba con mis amigas a la escuelita y amaba todos los útiles escolares (plumones, lápices, cuadernos, borradores, etcétera). En mi cumpleaños o navidad, un regalo perfecto para mí era material para la escuela.

A lo largo de mi vida conservé esta idea de convertirme en maestra, hasta que llegó la hora de salir de mi comunidad y cumplir mi sueño en la Escuela Normal del estado de Sonora.

Andrea Guadalupe Carriozoza López, Semillero Creativo de Pintura en Santa Ana, Sonora

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Siempre estuve inmiscuida en la docencia, pues mi mamá es maestra de educación especial y madre soltera. A veces, cuando suspendían clases, me llevaba a su trabajo y veía el gran amor que le tiene a su profesión.

A lo largo de mi vida he aprendido sobre el ajedrez, las plantas medicinales, el cacao, y me di cuenta que transmitir aquello que una sabe, es algo que alimenta el alma.

Giselle Anaid León Rojas, Semillero Creativo de Dibujo y Pintura en Acuamanala, Tlaxcala